Es el actinopterigio más venenoso, y el contacto directo con las espinas
de sus aletas, que contienen un potente veneno neurotóxico, puede ser
mortal para los seres humanos. Cuando se camufla se asemeja a un roca
(lo que le da su sobrenombre), lo que lo hace relativamente
irreconocible y pueden ser pisados de forma accidental. Sus púas se localizan en la aleta dorsal (12-13), anal (3) y pélvica (2), cada una de ellas cándula venenosa. El veneno es tan potente como el de la cobra, tiene citotoxinas y neurotoxinas.
Al picarse con una espina aparece un dolor intenso y lacerante, el
dolor se irradia por todo el miembro y alcanza su máximo a la hora. Se
acompaña de dolor de cabeza, vómitos, espasmos intestinales,
hipertensión arterial, en ocasiones con arritmias cardíacas, parálisis
musculares, convulsiones, coma y parada cardiorrespiratoria. Si
sobrevive el paciente, la curación de la herida es lenta, con
abscesificación de la misma. También posee una segunda linea de defensa,
los tubérculos, que son unas glándulas que además de ayudar a mimetizar
al pez segregan una toxina potente.
-Son muy buenos para esconderse, ya que se pueden poner en una alga, o incluso en la arena, y tu no poderlo localizar.
Se pueden atrapar con:
-Gusanos (Americanas, Asiáticas) o con gusanos de tierra.
-Rapalas (Si el pez es demasiado grande también se puede atrapar con una pequeña rapala)
Aquí os dejo un pez roca, pescado a rapala, si vais a intentar y a buscarlos, os recomiendo que tiréis a fondo, es raro verlos en la superficie.
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